"Al chirrido de los insectos sale la luna el jardín oscurece”
Masaoka Shiki
Le Voyage dans la Lune 1902, Georges Méliès. |
Es verdad que vieron a un anciano vagando por Luna. Cuando
llegaron apareció ante ellos tranquilo y apoyándose sobre un bastón muy alto. “He visto un bosque de vientos verticales que
soplaban al Sol. Está por allí” y se volvió señalando al horizonte negro.
Estaba tranquilo, ya digo, su cara parecía sosegada aunque
en tiempos fue un hombre atormentado, rígido y ansioso por convencer a todos de
la verdad, mejor dicho, convencer a Todos de la Verdad. Porque en él todo era
mayúsculo, máximo y superlativo. Pero desde que paseaba por la Luna le
desaparecieron las molestias.
Sus zapatos de cordones dejaban unas preciosas huellas en el polvo pero enseguida quedaban borradas por la tela azul que colgaba de su pantalón. Cuando se marchó sonó, casi imperceptible, el sonido de la flauta de Pan de un afilador.
El Olivo (2016), Icíar Bollaín
"Aquí nos hablamos en Morse. ¡Oye, qué curioso! cuando vienen nadie sabe. Punto, raya. Punto, raya...Nadie cose, lee, ni escribe, ni hace punto...apaga la luz" y todas las velas que no hay en la Luna se apagaron al instante, desprendiendo un agradable olor a tabaco rubio.
¡Qué sereno era su gesto! Había instalado miles de radios y transistores por toda la Luna. Así oía las noticias mientras se enjuagaba la boca con menta. Era una satisfacción enorme sintonizar una radio nueva. También instaló cometas y aviones y termómetros y barómetros..."Ha muerto", decía cuando se rompía algún aparato. Sin embargo, ya no sentía la necesidad de entonar un réquiem.
Señor entre muchos aparatos |
“¿Os quedaréis mucho tiempo?”, preguntó a los visitantes. “Bueno, mientras estéis aquí no espantéis a las avispas”, y se fue relajado y
sereno. Como si en la Luna hubiera encontrado todos sus objetos perdidos, como
si allí tuviera tiempo para todo y, lo mejor de todo, allí no tenía que
convencer a nadie de nada.
Había comprendido que la verdad no es importante, sobre todo
si era la suya. Y es que en la Luna hay menos gravedad....
De día viviré, pensando en tu sonrisa.
Por supuesto.